sábado, 2 de diciembre de 2006

una boda (segunda parte)

camino por la calle con una botella de tequila en la mano, recibo una llamada, contesto y nos ponemos de acuerdo. paso por unos cigarros, tomo un taxi, llego a mi destino.
radioheat en la grabadora la botella en la mesa, primer trago.
la platica se ameniza de inmediato, llegan nuevos amigos, el tema cambia como el temperamento de una mujer menopausica, escuela, chismes, quemar gente, quien se acuesta con quien, chistes y demas. de todo y nada.
las cartas sobre la mesa, miradas indiscretas queriendo leer el pensamiento del otro. la apuesta sube, las horas avanzan, la musica corre como viento del mar. un trago mas y sin darnos cuenta son las 3 de la mañana y la botella por morir ya.
el ambiente se vuelve confuso, las risas y las indiscreciones mas profusas, llega el momento de la musica tranquila, los boleros no se hacen esperar, entre la sandunga y besame mucho, voces desafinadas aúllan a una luna que no se deja ver. miradas y risas, complicidad y bromas pesadas que se olvidan despues de 3 tragos puros de tequila.
el telefono no deja de sonar y cada vez que intento contestar la pila me traiciona y apaga el celular. trato comunicarme, sin exito alguno, es hora de partir. las 5:30 de la mañana, el alba dislumbra poco a poco dando paso a la salida del sol. un taxista confundido por la mañana me lleva a mi y a una señora. la parada de ella la central camionera, al llegar confiesa que no era esa si no la otra, perdida de tiempo total, pero al fin logro llegar al hogar donde espera una madre furiosa y preocupada, el sermón de la mañana, las 6:15 y me dejo vencer por el sueño. en un momento mas tendre que despertar y afrontar la cruda realidad.

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